Antes de que acabe este año se pondrán en marcha las obras para eliminar un punto negro de accidentes en la carretera comarcal AC-550 a su paso por Portosín. El proyecto lleva meses gestándose y por fin está todo listo para que arranquen los trabajos tras la adjudicación de la actuación a la empresa Nemesio Ordóñez. Finalmente, la inversión necesaria para mejorar la circulación en la localidad ascenderá a algo más de 370.000 euros.
El proyecto ya es conocido. Se va a habilitar una glorieta en la intersección de la AC-550 con el acceso al puerto de Portosín y la avenida de A Constitución, un punto conflictivo en lo que respecta al tráfico puesto que concentra gran cantidad de vehículos pesados hacia la zona portuaria y por el incremento de los coches en circulación en los meses de verano. Además, el cruce se encuentra justo en una cura de radio reducido y con escasa visibilidad, por lo que urgía tomar medidas para mejorar la seguridad vial.
Lo que se va hacer en primer lugar es construir una rotonda en la intersección, lo cual permitirá calmar los tráficos y realizar giros más seguros. Además, se crearán nuevos pasos de peatones para mejorar la seguridad de los viandantes, y se instalará alumbrado nuevo.
La actuación tendrá continuidad en la avenida de A Constitución, en el acceso a la iglesia de Goiáns y al cementerio, donde se reurbanizará el espacio disponible para habilitar una zona de aparcamiento y se instalará una pasarela de madera sobre el riachuelo que hay en las inmediaciones para facilitar el acceso al templo. El proyecto se enmarca en el plan de la Xunta para la eliminación de puntos negros en la red viaria.